Por Víctor Méndez N.

En una conversación con un amigo, éste me preguntaba en qué había trabajado en mi vida, luego de contarle, me dijo “shis, pero oye no te alcanza la vida para hacer tanto ””epa, no te equivoques” respondí y en verdad es mucho, pero cada ocupación me dejó un aprendizaje y puedo confirmar que en “todas partes se cuecen abas”. Un servidor público de alto rango, agredía a su pareja, quien a su vez era servidora pública de más alto rango aun, tan violentamente que la dejaba sentada y tirada en el ascensor. Claro. Servidores públicos pero ciudadanos ABC1 donde esas cosas se tapan porque son mal vistas y no pueden figurar en las estadísticas ni mucho menos ser portada de algún periódico ¡¡¡¡”¿qué va a decir la gente, los amigos los familiares, en el club, en el vecindario, en la institución?!!!!!!!! Pero uno estaba obligado a guardar silencio. También fui parte de la llagada de FANTASILANDIA a Chile con la novedad de la montaña rusa. El primer carro no debía enviarse solo o era augurio de mala suerte, según el técnico que la armó, un viejo con cara de bonachón neozelandés, adivinen ustedes quien fue voluntario, muerto de miedo, de puro metiche nomás, después de aquello, ya no hay miedo, ni a las alturas ni a la velocidad, En otra ocasión vendí portafolios en las micros amarillas, nunca entendí porqué no ganaba tanta plata como otros “me faltaba ser más “grupiento” creo yo a pesar de conocer el libreto de memoria, en fin fueron muchas actividades en mi vida.

VMN